Conforman una Comisión Técnica de Transición; la transnacional se iría el 31 de diciembre de este año para dar paso a una empresa pública

AISA-Suez vive sus últimos días en Bolivia

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(ABI).- Luego de nueve años de permanencia en Bolivia, la empresa francesa Aguas del Illimani Sociedad Anónima (AISA) inició su salida de La Paz y El Alto luego de que la Superintendencia de Saneamiento Básico presentara hoy una Comisión Técnica de Transición a cargo del ingeniero Luis Aliaga.

"En el espíritu de una solución amigable del conflicto entre AISA y el gobierno, me cabe presentarles a una Comisión de Transición que ha de permitir una salida ordenada de Aguas del Illimani sin que se altere la prestación de servicios básicos a la población", declaró el Superintendente de Saneamiento Básico Alvaro Camacho.
En las instalaciones de la empresa Aguas del Illimani, Camacho, dijo que este periodo culminará el 31 de diciembre y que la Comisión se encargará de indagar los aspectos operativos actuales de los servicios que presta AISA en ambas ciudades y que fueran seriamente cuestionados por el pueblo alteño.
El representante de la Comisión Técnica de Transición trabajará de manera conjunta con el Gerente General de AISA Antoine Kuhn y posteriormente preparará proyectos de planificación para la ejecución de inversiones con miras a la administración del recurso agua y servicios básicos a partir del 2007.
"En los próximos días, coordinadamente con AISA, va a trabajar en recopilar información. se garantizará el servicio para ambas ciudades. Estimamos que hasta el 31 de diciembre se debe transferir el servicio", subrayó Camacho al señalar que Aliaga es experto en el rubro.
Tal como lo anunciará el presidente de la República, Evo Morales, el 16 de octubre pasado, este es el comienzo de la salida de AISA de Bolivia para que una empresa con participación edilicia y social, se haga cargo del servicio de abastecimiento de agua potable en la ciudad de El Alto y La Paz a partir del 2007.
El Ministro de Aguas Abel Mamani prometió una conferencia de prensa en las próximas horas para brindar mayores detalles respecto de la Comisión Técnica de Transición que ya comienza sus labores.

Los franceses dispuestos a irse
Kuhn informó que los ejecutivos de esa empresa francesa se reunirán el próximo 9 de noviembre para cerrar el contrato con Bolivia. "Los socios de Aguas del Illimani van a reunirse el 9 de noviembre en una junta extraordinaria para aprobar el proyecto de acuerdo del fin del contrato de concesión. Todos los socios y ejecutivos de la empresa y empleados fueron informados directamente a través de mi palabra sobre la decisión del Gobierno boliviano", afirmó Kuhn en referencia a las palabras del Presidente.
A decir del ejecutivo de AISA, hasta el día de la entrega de la "llave de la responsabilidad", no habrá codirección en la empresa de aguas. Sostuvo que "hay solamente un espíritu de buena fe" luego de la auditoria que se realizará a la empresa francesa y que hoy se halla en poder de la Superintendencia de Saneamiento Básico.
"Esperamos firmar rápidamente un acuerdo de fin de contrato para abrir realmente un tiempo de transición. A la fecha hay una responsabilidad de AISA para mantener el servicio publico para los alteños y paceños", declaró.
Según Kuhn, los ejecutivos de la transnacional francesa se hallan "muy orgullosos" del trabajo realizado durante nueve años en Bolivia, pese al descontento social que provocaran en la urbe alteña hace cuatro años atrás y que se expresó en la denominada "guerra del agua", pues el servicio no llegó a los distritos prometidos.
"Es verdad que uno en la vida puede hacer más, hay una sensibilidad muy alta en El Alto", confesó Antoine Kuhn al tiempo que señaló que los 400 empleados de esa empresa permanecerán en sus fuentes de trabajo hasta el día en que se vayan de Bolivia.