La principal falla, entre otras, que hallaron los peritos de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (SIB), después de analizar los tinglados caídos el año pasado en la ciudad de El Alto, es que fueron construidos con fierros delgados.
De acuerdo con el Director de Obras de la Alcaldía de ese municipio, el ingeniero Freddy Llampa, el informe señala que esas estructuras sobre escenarios deportivos de unidades educativas fueron levantadas con fierro de dos milímetros de espesor, cuando los "contratos y los proyectos" demandaban tres milímetros.
Los peritos también hallaron que los contratistas no cumplieron con las especificaciones técnicas de los proyectos, que no hicieron los cálculos estructurales adecuados para saber si podían soportar peso, como el provocado por la granizada del 8 de julio, cuando se produjeron algunos incidentes.
En esa fecha, la nevada acumulada en los techos de esas estructuras derivó en que 11 de ellas se desplomaran, sin daños personales. Cada uno de esos techos le costó al municipio entre 150 mil y 180 mil bolivianos.
El director de Educación de ese municipio, Carlos Marca, reveló también que los 61 tinglados construidos en la gestión del ex alcalde José Luis Paredes fueron edificados "sin planificación", porque son muy altos (hasta 20 metros), la "mayoría" tiene calamina metálica, cuando lo recomendado es un 50 por ciento de la superficie con calamina plástica para que deje pasar el sol; ninguno tiene muros de cerco ni graderías, y el 60 por ciento presenta problemas con las canaletas y bajantes. "La comuna está reparando y arreglando esos tinglados y reconstruirá los 11 que se cayeron".
Debido a los problemas, la Alcaldía de El Alto inició el 9 de julio de 2007 un proceso penal en contra de las nueve empresas que participaron en la construcción de esas estructuras y en contra de los fiscales de obras y supervisores (funcionarios ediles), bajo la acusación de estafa, conducta antieconómica y contratos lesivos, informó la Dirección Jurídica del municipio alteño.
El juicio continúa en etapa preliminar, siete meses después de la acusación, debido a que aún cuatro empresas no se presentaron ante el fiscal Fernando Mitta. La Dirección Jurídica decidió solicitar el mandamiento de aprehensión de los implicados y pidió al director de obras la lista de los supervisores y fiscales de los trabajos que participaron en el control y recepción de esos trabajos para incluirlos en el proceso judicial.
En espera del proceso penal, la Dirección de Educación presupuestó para esta gestión la reconstrucción de los 11 tinglados caídos, con un costo de 300 mil bolivianos por cada una de ellos, unos 120 mil bolivianos más que los anteriores. Marca explicó que esos son superiores debido al alza de precios de los materiales de construcción en especial del fierro.
Dijo que espera que las empresas devuelvan el dinero invertido en las anteriores construcciones, cinco de ellas manifestaron su deseo de resarcir con el 10 y 80 por ciento.
Fuente: www.laprensa.com.bo
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