Madeleyne Aguilar/ Página Siete. La piscina semiolímpica de El Alto se encuentra abandonada y con daños de infraestructura.
Madeleyne Aguilar / El Alto
La piscina semiolímpica de El Alto está inactiva y deteriorándose desde enero. La dirección municipal de Deportes cerró las instalaciones porque fallas en el equipo de limpieza del agua provocaron alergias en los usuarios. El Concejo pidió un informe de la infraestructura estrenada hace 18 meses.
"Es una piscina donde se debe brindar servicio a jóvenes y niños, pero lamentablemente vemos que sólo hay tres personas en el lugar: el portero, el guardia municipal y una persona de limpieza", dijo la vicepresidenta del Concejo, Nancy Mamani, que ayer realizó una inspección tras la cual solicitó un informe oral a la dirección edil de Deportes.
La piscina se encuentra en la zona Santa Rosa del distrito 1 de El Alto. En las puertas cerradas se expone un letrero que indica que las clases están suspendidas "hasta nuevo aviso". Dentro, la fosa de 25 metros de largo por 12,59 de ancho contiene agua verduzca con presencia de algas.
En el atrio, las esculturas están desportilladas y sin mantenimiento. "Nos la han entregado tal como está ahora: en malas condiciones", aseguró la directora deportes del municipio, Vanesa Illanes Tapia.
La piscina semiolímpica fue inaugurada el 17 de agosto del 2014, durante la gestión del alcalde Édgar Patana.
Se construyó con una inversión de más de 15 millones de bolivianos, financiado por el Estado y en menor porcentaje por la Alcaldía.
Según Illanes, el equipo de filtros que limpia el agua presentó las fallas desde agosto pasado. "Nos hemos dado formas para limpiar. Hemos hecho todo lo posible, pero ha llegado el punto en que los niños han presentado alergias. Entonces, suspendimos las clases. Podían presentarse otras enfermedades, incluso estomacales", informó.
La vicepresidenta del Concejo municipal dijo que los vecinos que inscribieron a sus hijos a los cursos de natación en enero se quejaron por los cambios de horarios de clases y el posterior cierre de la piscina.
"Todos depositaron 102 bolivianos a las cuentas del gobierno municipal. Son 60.000 bolivianos que han ingresado y deberían utilizarse para el mantenimiento y refacción de la piscina", reclamó Mamani.
Al respecto, la directora de Deportes aseguró que no se recibieron inscripciones desde diciembre del 2015 y para los alumnos que habían cancelado se repusieron las clases en horas extras y en fines de semana.
Mamani denunció también que no se contrató personal profesional para enseñar natación. "En el informe escrito dice que no se ha podido contratar al personal adecuado para que brinde este curso. Los instructores han sido estudiantes antiguos, pero hay un presupuesto dentro que debería ser designado para personal", reprochó la concejala.
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