El sistema de transporte masivo fue inaugurado el domingo en la cancha de tierra de la zona Ecológico Los Pinos, donde se presentaron 20 buses y micros de color azul y verde, con capacidades para 30 y 40 asientos.
Fueron los vecinos quienes habían convencido a los propietarios de esos motorizados, muchos de los cuales vivían en el distrito, para conformar este nuevo sistema. El objetivo era paliar el deficiente servicio de la línea de minibuses 661, del sindicato 27 de Abril que, según los vecinos, desaparecen a partir de las 18.00 e incluso se ausentan durante el día.
Pero ayer ninguno de los vehículos se presentó al punto de parada definido el domingo (a un costado de la cancha y frente al colegio Los Pinos) porque habían sido amenazados, de manera verbal, por los minibuseros.
Un dirigente de la zona, que no quiso identificarse por temor a represalias de los conductores, dijo a los periodistas que ésa es la razón para la ausencia de los micros y buses, pero luego aseguró que insistirán con los micreros para que no desistan y que incluso les ofrecerán garantías para continuar.
"No queremos problemas, sólo queremos trabajar y darle a la población la posibilidad de llegar hasta su destino de manera segura y sin costos elevados, con recorridos completos", comentó el propietario de un micro —que debía integrar el nuevo servicio—, que igualmente pidió guardar en reserva su nombre por miedo a que se cumplan las amenazas.
Según ambos, los minibuseros les dijeron que romperían sus vidrios si es que continuaban con el plan del nuevo transporte. Los choferes y dirigentes del sindicato 27 de Abril, consultados por los medios de comunicación, se negaron a declarar y se limitaron a señalar que no sabían nada sobre el tema.
El servicio inaugurado el domingo debía costar un boliviano de parada a parada, con la promesa de no incrementarlo, y tenía que recorrer 20 zonas de ese distrito, partiendo de la zona Ecológico Los Pinos hasta la extranca de Senkata y calle 5 de la avenida 6 de Marzo, para retornar a la parada.
Para los vecinos, este nuevo transporte es vital porque "por culpa de los choferes de los minibuses, que hacen lo que les da la gana, nos asaltan, pasamos frío, debemos caminar por muchos kilómetros, ya que ellos escogen a quién suben, y los niños y los ancianos son los más perjudicados", comentó don Silverio Q., uno de los vecinos.
Una réplica vecinal a la amenaza
Los vecinos están decididos a que el nuevo sistema de transporte masivo, que así lo denominaron, se ponga en práctica debido a las deficiencias del actual servicio. Ellos anunciaron que insistirán con los choferes de micros y buses, a quienes darán garantías para que recorran las 20 zonas del Distrito 8. También advirtieron a los minibuseros que si cumplen con su amenaza de romper los vidrios de los micros y buses, ellos harán lo propio con sus motorizados. Los habitantes de ese distrito esperan que los micros y buses ingresen en cualquier momento.
Édgar Patana dice que estudia nuevo servicio
El alcalde de El Alto, Édgar Patana, anunció que trabaja en la implementación de un sistema de transporte masivo en la ciudad de El Alto, pero a mediano plazo.
Dijo que al momento se realizan diagnósticos con ese objetivo. "Sobre todo las vías troncales, éste es un proyecto a mediano plazo y lo que se hace es ver cómo funciona el transporte, porque hay una urgente necesidad de esto en la población".
Anunció, después, "que se está a la espera del financiamiento para aplicar proyectos de transporte masivo. No sabemos si al final este servicio será llevado a cabo de manera mixta o privada como se está viendo hasta este momento".
Esta autoridad coincidió con el presidente de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto, Rubén Paz, en sentido de que esta ciudad requiere un mejor servicio dadas las limitaciones de los minibuses que copan esta demanda.
"Sabemos que no es una tarea fácil, pero éste es uno de los mayores problemas en esta ciudad que se presenta en lo cotidiano y que a veces, por ser el pan de cada día, pasa desapercibido", acotó el dirigente. Para Patana, el mal servicio de minibuses motiva las iniciativas vecinales como las del Distrito 8 y por eso remarcó que se trabaja en una alternativa.
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